Guardia dejó caer su arma y casi se mató accidentalmente
JUAN L. MALLORQUÍN. El guardia de seguridad de un bar karaoke fue a parar en el hospital con una herida de bala que se produjo accidentalmente. Ocurrió este martes a las 2:30h en el centro de la ciudad. El custodio Isidoro Irala (44) llegó al centro de salud con un balazo en la región lumbar. Los médicos que lo asistieron indicaron que la bala quedó alojada en su cuerpo. El propio guardia explicó a los policías que estaba sentado dentro de su local de trabajo y al levantarse su revólver se cayó de su cintura, disparándose accidentalmente.