Un hombre de 35 años murió de dos puñaladas en un establecimiento ubicado en Ñacunday, donde se desempeñaba como capataz
Un hombre de 35 años murió de dos puñaladas en un establecimiento ubicado en Ñacunday, donde se desempeñaba como capataz. Personas desconocidas lo habrían atacado en su lugar de trabajo.
La víctima fatal fue identificada como Roque Ramón Cardozo Alderete, de 35 años, quien además residía en su lugar de trabajo.
El hombre fue encontrado en el sitio mencionado con el torso desnudo, tendido en el suelo, sin signos de vida, con dos heridas de arma blanca en la parte axilar antebrazo y otra en la espalda.
Los agentes de la Subcomisaría 43ª de la colonia Mbarete, del mismo distrito, constataron el hecho tras el aviso vía telefónica de un vecino.
Luego de ser inspeccionado el cuerpo del fallecido por médicos forense, se determinó como causa de muerte un shock hipovolémico. Cardozo habría muerto desangrado.
El Ministerio Público dispuso el levantamiento del cadáver y el traslado por parte de funcionarios de la funeraria San Ramón hasta el centro asistencial Medical Center, de la ciudad de Santa Rita, donde se le practicarán muestras laboratoriales.
La investigación, mientras, sigue en curso.