Violento sujeto condenado a 13 años de prisión por tentativa de feminicidio
La justicia condenó a 13 años de encarcelamiento a un hombre violento que estaba procesado por violencia familiar y tentativa de feminicidio. En la época el mismo atacó a su concubina con un cuchillo de carnicería y le causó dos heridas, pero la víctima consiguió zafar y pedir ayuda. Anteriormente el ahora condenado ya había maltratado a la mujer, que incluso intentó autoeliminarse por ese motivo.
El juzgamiento del golpeador concluyó el miércoles en el Poder Judicial de Ciudad del Este.
Sergio Javier Brítez Aguilar (36) deberá pasar 13 años encerrado en una prisión de acuerdo a la sentencia aplicada por el tribunal integrado por los magistrados Carlos Vera, Milciades Ovelar y Emilia Santos. El mismo estaba procesado por la fiscal Denise Duarte, de la unidad de lucha contra la violencia familiar, que durante los alegatos finales solicitó una pena de 18 años de cárcel.
Según los antecedentes, en junio de 2.021, Brítez mantuvo una discusión con su concubina y la maltrató física y psicológicamente. Todo ocurrió frente a los hijos de la mujer, que a consecuencia de eso comenzó a redactar una carta de despedida en medio de llantos. Uno de los niños se percató que pretendía suicidarse y rápidamente alertó a su abuela. Minutos después un hermano llegó hasta el domicilio y forzó la puerta para ingresar, encontrando a la víctima a punto de ahorcarse. Felizmente el suicidio fue abortado. Tras el incidente Brítez fue procesado por violencia familiar y fue beneficiado con arresto domiciliario.
El 19 de septiembre del mismo año, pese a tener prohibido acercarse a 300m de la víctima, Brítez volvió a la casa. En estado etílico golpeó a la mujer y amenazó con matarla a ella, a su madre y a sus hijos para luego suicidarse. Tras la agresión el hombre trancó a la víctima dentro de la casa y salió a comprar más cervezas. Al regresar se apoderó de un cuchillo y primero cortó sábanas y almohadas, mientras insultaba a la mujer. Luego la agarró desde atrás y le tapó la boca, ínterin que la apuñaló en el abdomen y el brazo derecho. La afectada logró zafar y mientras trataba de abrir la puerta casi sufrió una puñalada en la espalda, pero consiguió llegar a la calle para pedir ayuda y desvanecerse. El ahora condenado huyó del lugar, pero minutos después fue detenido con el arma blanca manchada de sangre.
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