ROBÓ UNA MOTO Y SIN SABER LLEVÓ AL TALLER DEL HERMANO DE LA VICTIMA
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Un delincuente algo desafortunado y con un rosario de antecedentes delictivos llegó tranquilamente hasta un taller de motocicletas para solicitar la reparación de un biciclo como si fuese suyo. El propietario del local rápidamente se percató que se trataba de la moto hurtada de su hermano y alertó a la comisaría del barrio. El curioso hecho se produjo el lunes a las 18h en el barrio Santa Ana.
El que fue a parar en la boca del lobo por torpe y terminó preso es Salvador Villalba Cañete (40), vecino del asentamiento Belén del barrio Che La Reina, de quien se recuperó una motocicleta Motostar 150NT azul, con chapa 490 CCT, que fue hurtada el domingo. Según los registros de la Policía Nacional, el malviviente cuenta con un antecedente por hurto agravado, tres por tentativa de robo agravado, tres por robo agravado, dos por tentativa de homicidio doloso y uno por homicidio doloso.
De acuerdo a los datos, en el mencionado horario Villalba llegó hasta el taller de motocicletas Carlitos Repuestos, perteneciente a Carlos Alberto Gómez Espínola (34), y solicitó algunas reparaciones al mencionado biciclo. Al observar la moto, el dueño del taller reconoció algunas características y se percató que se trataba del biciclo que fue hurtado de su hermano Arnaldo Damián Gómez Espínola (20) un día antes.
Ante el flagrante alertó a la subcomisaría 3ra y los uniformados llegaron algunos minutos después para proceder a la aprehensión de Villalba.
Los uniformados no indicaron si fue el propio Villalba que cometió el hurto del biciclo o si solamente lo redujo de otra persona y lo llevó al taller. Tras su aprehensión quedó recluido en la Dirección de Policía a cargo de la fiscal Carolina Gadea.
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